Mitos sobre la residencia fiscal en Panamá: qué tiene que saber a la hora de elegir esta opción

Panamá es más que un destino atractivo para los negocios: es un excelente lugar para aquellos que buscan residencia fiscal y soluciones de baja tributación. Sin embargo, han surgido varios mitos sobre Panamá y su residencia fiscal. En este artículo, arrojaremos luz sobre los preconceptos erróneos más comunes y revelaremos la verdad detrás de ellos. Ya sea que esté considerando la posibilidad de obtener residencia fiscal en Panamá o simplemente quiera conocer las complejidades del proceso, esta guía le proporcionará la información esencial. La preparación de impuestos es a tener en cuenta para los nuevos residentes de un país, incluso si este tiene tributación territorial. 

Mito vs verdad sobre convertirse en residente fiscal en Panamá

Existen muchos mitos sobre la residencia fiscal en el extranjero, por eso, un artículo como este es muy necesario. Si realmente le interesa esta estrategia, siga leyendo nuestra guía. 

Mito 1: Si establezco a Panamá como mi lugar de residencia, no estaré sujeto a impuestos.

Verdad: Si bien es cierto que vivir en Panamá le exime de pagar impuestos sobre sus ingresos derivados del extranjero, aún debe preparar impuestos y pagar tributo por sus activos o ingresos ubicados, ganados o recibidos dentro de Panamá.

Esto también se aplica si transfiere sus fondos de una cuenta en el extranjero a su cuenta local en Panamá. En otras palabras, si recibe sus ingresos, o una parte de ellos, en Panamá, no escapará de los impuestos. De todos modos, el objetivo de una buena estrategia financiera no es evadir impuestos, sino reducirlos legalmente.

Mito 2: Si obtengo la residencia fiscal en Panamá, no tendré que pagar impuestos en ningún otro lugar.

Verdad: Cuando obtiene la residencia fiscal aquí, esto no significa que está automáticamente exento en otras jurisdicciones. La mayoría de los países y naciones determinan la residencia fiscal de una persona en función del número de días que pasan en el país en el lapso de un año. Por lo general, solo se necesitan seis meses para que una persona sea considerada residente fiscal. Por lo tanto, tenga en cuenta que uno de los más arraigados mitos sobre la residencia fiscal acaba de caer. Tener un certificado de residencia fiscal en Panamá no le eximirá de pagar impuestos en un país diferente, pero le ayudará si tiene negocios o cuentas en un lugar donde no reside. En tal caso, su banco extranjero informará a Panamá, no obstante, allí no pagará impuestos por dichos activos.

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Mito 3: Si obtengo residencia en Panamá, automáticamente soy residente fiscal.

Verdad: Obtener una residencia legal trae muchas ventajas, pero no le convierte en residente fiscal de inmediato. Si bien obtener la residencia legal es un paso en la dirección correcta, para obtener la residencia fiscal necesita un compromiso más sustancial. Si habla con personas que están interesadas en estos temas, descubrirá que este es uno de los mitos sobre la residencia fiscal que más confunde a los lectores. Quien desee obtener la residencia fiscal, debe vivir en Panamá durante un mínimo de seis meses al año y proporcionar documentación de respaldo que demuestre que ha estado realmente presente (físicamente) en el país. No hay un requisito específico sobre qué documentos deberá presentar, pero, en general, las autoridades buscan comprobantes de pago que muestren tarifas de matrícula, gastos de transporte, facturas de servicios públicos, compras de comestibles y otros documentos relevantes.

Mito vs Verdad: Proceso de solicitud de residencia fiscal en Panamá

Para iniciar el proceso de solicitud de residencia fiscal en Panamá, primero debe obtener una residencia legal a través de cualquiera de sus programas innovadores. Puede elegir entre una variedad de ellos. Para obtener más información, consulte nuestra sección de residencia y ciudadanía. Una vez que obtenga el estatus de residente legal, puede comenzar su proceso de solicitud de residencia fiscal en Panamá.

Recuerde que para obtener la residencia legal necesitará tener vínculos económicos con el país, estar en perfecta salud y tener un historial policial limpio. Luego, como dijimos anteriormente, puede obtener la residencia fiscal demostrando su presencia física. Cabe destacar que la preparación de impuestos debe ser llevada a cabo por un profesional de confianza. 

Metodos para evitar la doble tributación

La doble imposición preocupa a muchos de nuestros lectores. Esto se puede resolver cortando lazos con cualquier país que pueda considerarlo residente fiscal. Otra opción es aprovechar los muchos tratados para evitar la doble imposición que puede encontrar en Panamá. Los tratados internacionales para evitar la doble tributación generalmente proporcionan recursos como exenciones o créditos fiscales para evitar que pague impuestos dos veces sobre los mismos ingresos.

Descargo de responsabilidad: antes de tomar cualquier decisión de migración o residencia fiscal, asegúrese de consultar con un experto en la materia. Además, busque expertos en cada país donde tenga conexiones, como negocios, residencia o pasaporte, que le ayuden a preparar impuestos cumpliendo con todas las normativas. 

Mito vs verdad: conclusión sobre la residencia fiscal en Panamá

Panamá ofrece un ambiente excelente con la posibilidad de evitar la doble imposición y la oportunidad de reducir significativamente su carga fiscal de manera legal.

Además de desentrañar los mitos que rodean la residencia fiscal en este hermoso país, le invitamos a considerar cualquiera de sus programas de residencia. Finalmente, asegúrese de que todo lo que haga esté respaldado por los profesionales adecuados, ya que no es conveniente lanzarse a tomar una decisión tan importante por sí mismo.

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